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Un Blog de Edwin "El Bachi" Velásquez - Leal al Comandante Chávez y a Nicolás Maduro por el Socialismo Bolivariano - Delegado del Partido Socialista Unido de Venezuela - Comisionado Estadal de Formación Política de la JPSUV (D.C) - Premio Municipal al Liderazgo y Activismo Juvenil Livia Gouverneur 2012 y 2013 Mención Honorífica Mejor Liderazgo Juvenil - Vivir y Vencer Camaradas - ¡Viva Chávez! ¡Viva la Revolución!

9 de mayo de 2010

Una crítica más:

Edwin "L´Bachi" Velásquez


Quienes estuvimos presentes en el Congreso Extraordinario del Partido, nos dimos cuenta que el nivel ideológico de la mayoría de nuestros delegados y delegadas es precario, hombres y mujeres que asumieron la responsabilidad otorgada por las bases para constituir una verdadera organización revolucionaria, de izquierda, cuando menos marxista y antiimperialista, que exaltase su poder de base, no pudieron cumplir con su papel ante la historia porque casi ninguno supo interpretarlo o asumirlo, y es que ¿cómo se puede interpretar y asumir el desafío y la carga del tiempo histórico revolucionario sin formación revolucionaria, sin visión global, sin conciencia política de la totalidad?

Mucho más preocupante ha sido el papel de nuestras bases, hombres y mujeres que aún se dejan llevar por la mass media, por los bellos discursos sin fundamento ideológico, por la subjetividad de las palabras de los dirigentes sin práctica revolucionaria, por el dinero y los bienes materiales que le ponen precio a la inconsciencia, y así va la mayoría, con nuestros problemas que son tomados en cuenta cada vez que quieren votos, con nuestros votos que son un negocio para conseguir Poder; nuestro Poder secuestrado que no irá a las bases que tienen que esperar otras elecciones para conseguir soluciones, pero que no terminan de organizarse para asumirlo. 

Es así como en el Congreso vimos reflejado la correlación de las fuerzas tendenciosas de cada estado del país. No es un secreto para nadie que la mayoría de los delegados y delegadas del Partido obedecen y responden a un factor o grupo de poder con sus propios intereses y pretensiones, casi todos alejados de los intereses de la Revolución, casi todos esforzados para conseguir un racimo de cambures a costa de las debilidades y carencias de nuestro pueblo, casi todos con el don de la palabra, picos e´ plata, unos alcaldes y otros gobernadores, unos ex ministros y otros diputados, unos concejales, presidentes de instituciones y otros cuando menos pertenecientes a algún grupo de éstos mismos, pero la mayoría fijados en escalar posiciones individuales dentro del sistema burocrático del Estado Burgués, sin la claridad ideológica para destruirlo sino por el contrario, para reforzarlo.

La Dirección Nacional del Partido en dicho congreso también ha jugado un papel trascendental que en lo personal catalogaría de estancamiento de las voluntades de las fuerzas revolucionarias. Todo lo han configurado para que el Partido no se constituyera como el Partido de la Revolución, sino para que se constituyese como el Partido de la Dirección Nacional, de un cogollo, de unos pocos que se escudan en la supuesta “voluntad” del presidente.

Un Congreso improvisado, sin metodología clara, ideológicamente débil y además consumido en las coyunturas nacionales e internacionales le dejó poco al debate político-ideológico que produjera documentos realmente relevantes para la historia a las generaciones futuras, al extremo que ni siquiera surgieron unos estatutos verdaderamente revolucionarios dignos de un Partido Socialista pero que sin embargo, disciplinadamente acato.

La influencia de la Dirección Nacional en el tema estatutario es también digna de un pequeño análisis. En vez de enseñar a los delegados y delegadas del Partido cómo se diseñan unos estatutos y cuál debe ser su estructura, además de promover investigaciones sobre los mismos y demás reglamentos de partidos socialistas y comunistas del mundo (cosa que hicieron muy pocos delegados por su cuenta), se limitaron a entregar un borrador de estatutos que impulsaban un partido de centro izquierda que hablaba de revolución y socialismo.

Tristeza y cólera sentimos al ver con indignación la reacción de los delegados y delegadas ante tan despreciable documento, algunos estados del país sin ánimos de discutir lo aprobaron después de una única lectura, otros estados solo le hicieron unas pocas modificaciones a algunos artículos, y unos pocos críticos con visión revolucionaria, después de un análisis serio del documento, se fijaron la creación de un manuscrito verdaderamente acorde al perfil de lo que debería ser el Partido de la Revolución, lo cual no tuvo resultados favorables pues, los delegados y delegadas verdaderamente formados son la minoría en el Congreso.

Lamentable el papel que jugaron la mayoría de éstos hombres y mujeres que se dedicaron a discutir sobre las bases de las coyunturas, lamentable que la mayoría de éstos personajes ya tenían en su espalda una etiqueta que los identificaba con un nombre, con una tendencia personalista pero no con una corriente ideológica, hombres y mujeres sin criterios propios que manejaban las discusiones en voz alta y por mensajes de texto para aclarar sus dudas y recibir lineamientos; son las mismas y los mismos ingenuos con los que se benefició la Dirección Nacional para que pensaran que todo lo que de ellos emanaba lo sabía Chávez, que tan nefasto borrador estatutario había sido revisado por él y aprobado para su difusión y que todas las propuestas que surgían de la Dirección Nacional estaban avaladas por él mismo, pero mucho peor es el hecho de hacer ver que la selección de los candidatos y candidatas del Partido para las elecciones internas con miras a la Asamblea Nacional debían ser escogidos por el presidente porque supuestamente era un lineamiento que él mismo había dispuesto, y así fue aceptado y aprobado por dicho Congreso.

Sorprendidos quedaron los miembros de la Dirección Nacional cuando el comandante fijó posición resteándose con las bases, misma Dirección Nacional que hostigó y sancionó a camaradas que desde el Congreso ya habían defendido tal posición, pero que el comandante les dejaba con la razón de su parte y la satisfacción de no consentirle tal responsabilidad a unos pocos, mayor reto el de los “diputados” que tuvieron cuatro (4) años para legislar y no lo supieron aprovechar, definitivamente pensaron que las bases sabrían pasar factura.

Luego de tan importante anuncio, por nuestra parte se definió un equipo para dar la batalla en los cinco (5) circuitos del Distrito Capital y con ellos nos alistamos en campaña, el Comandante Soto Rojas, Xiomara Lucena, Eduardo Piñate, Andreina Tarazón, Rafael Fernández y Antonieta de Stefano fueron nuestros candidatos para levantar las banderas del Pueblo Legislador, definitivamente fueron las mujeres y hombres socialistas y revolucionarios o quienes más se acercan a esa corriente ideológica, y por ende nos avocamos a dar una pelea firme contra el clientelismo, el ventajismo, la mediática y la trata de conciencias, pero más allá de eso, lo inesperado, una pelea contra Chávez sin siquiera Chávez saberlo.

El miedo es libre pero puede causar mucho daño, lastimosamente muchas y muchos de nuestros dirigentes se vieron acorralados ante la amenaza de quedar fuera del parlamento, de perder Poder, y otros, sin formación revolucionaria comenzaron a luchar por obtener la oportunidad de ser candidatos, más que una lucha por el pueblo, un deseo de capricho personal, contra nosotros comenzó inmediatamente una guerra en la que se nos puso en medio a Chávez, nuestro líder indiscutible, una campaña atroz se configuró en nuestra contra, “el chavismo sin Chávez” y ante tal afirmación una de las consignas contraideológicas más perversas usada para refutar nuestro proyecto: “¡con Chávez todo, sin Chávez nada!”. Que manera tan sucia y maldita que insistentemente repetían para sacarnos del terreno político, sin argumentos, sin sustento ideológico, sin propuestas políticas que objetaran las nuestras, que necedad y cuánta bajeza, no somos el chavismo sin Chávez pero los proyectos no mueren, son nuestra razón de lucha por el pueblo, el liderazgo del hombre solo nos abre el camino para su concreción, pero los hombres no somos eternos, cometemos errores y podemos cambiar de opinión, hoy Chávez es el líder indiscutible de la Revolución así como indiscutible será por siempre, más que cualquier otra cosa, nuestro proyecto de vida para la salvación y liberación de los pueblos del mundo: el Socialismo.

El comandante lo dijo en el Poliedro de Caracas aquel domingo de la clausura del Congreso Extraordinario al escuchar aquella consigna: “triste de una revolución que dependa de un hombre o una mujer”, y al poco tiempo, luego de volver a escuchar tan malintencionada consigna dijo una frase magnífica que envuelve el verdadero sentido de nuestra lucha: “¡Con el pueblo todo, sin el pueblo nada!”, sin embargo aquella ironía no cesó y en muchos hombres y mujeres caló, pero supimos dar la batalla limpiamente y podemos decir con orgullo revolucionario que no compramos conciencias, no ofrecimos créditos ni techos de zinc, ni motos, ni becas ni puestos de trabajo, no amenazamos a nadie, no chantajeamos a nadie, por el contrario, jugamos limpiamente, con todo y nuestro puritanismo, ofrecimos un proyecto, una nueva manera de legislar, la oportunidad de ser protagonistas y no de seguir siendo meros espectadores, nuestra campaña fue ideológica y no populista, fue ideológica y no demagoga, fue con y por Chávez, pero antes que todo, fue con y por el pueblo.

A parte de las consignas que alinearon en nuestra contra, se encontraba también el factor tiempo. En un principio el Partido fijó el período de campaña electoral desde el sábado 10 de abril hasta el viernes 14 de mayo, teniendo como fecha de las elecciones primarias el domingo 16 del presente mes, es decir, 34 días de campaña electoral suficientes para dar a conocer a los precandidatos y precandidatas que tienen poco o ningún acceso a los medios de comunicación. Finalmente, en una decisión vejatoria tomada por la Dirección Nacional del Partido, se hizo un reajuste en los lapsos electorales y decidieron pautar el domingo 2 de mayo como fecha de las elecciones primarias, lo que de inmediato acortó el tiempo de la campaña a 20 días para recorrer todos los sectores posibles de todas las parroquias que comprenden los distintos circuitos del país.

Destaco que la Dirección Nacional está conformada por la presidenta de la Asamblea Nacional, por su Vicepresidente, y por unos cuantos aspirantes a la misma que lamentablemente han tenido una pésima gestión pero que además saben que dándole mucho tiempo a los precandidatos por el Partido para ser los candidatos definitivos con miras a la Asamblea Nacional, podrían ganarse la confianza del pueblo y por supuesto, no podían permitir eso, debían impedirlo, para ello configuraron una nueva estrategia, rodar la bola de que ellos eran los “candidatos de Chávez”.

Esta nueva consigna se respaldó con el acercamiento de éstos candidatos y candidatas a todos los actos públicos transmitidos por televisión en donde se encontraba el presidente Hugo Chávez, salían normalmente a su lado o detrás y eso valió más que 1 millón de volantes o que 1000 visitas en todas las parroquias de Caracas. También es necesario destacar que el presidente dejó mucho qué pensar el domingo 2 de mayo cuando se dispuso a votar y en el mismo lugar se encontraban algunos precandidatos que daban a entender al pueblo que ellos mismos eran los “candidatos de Chávez”, ¿Cómo ganar contra eso?, injusto ventajismo.

Por un momento nos encontramos ante un nuevo escenario de la política nacional en el que el Estado burgués nos puso a jugar en su tablero de ajedrez con todas las fichas en contra, y bien sabemos que no estamos para equivocarnos. Hoy hemos jugado limpiamente y una vez más la razón y el pueblo se han puesto de nuestro lado, quizás para unos no ganamos pero definitivamente con ésta campaña nos hemos dado cuenta que no haría falta redoblar esfuerzos si el pueblo tuviese un poco más de formación y conciencia revolucionaria, muchos nos dieron la confianza, la gloria y el riesgo de poner en jaque a los dinosaurios que se quedaron en la era Jurasica de las reformas y los beneficios que nos permiten seguir aceptando una mejor condición de esclavos del viejo sistema y el capital, quiere decir que sí se pueden hacer las cosas de otra manera, la mitad de nuestros militantes lo expresaron con sus votos.

Supimos desde el principio que no estábamos ante cualquier proceso electoral, y que de por sí es histórico el hecho de que un partido como el nuestro, con todo y sus debilidades, se haya permitido unas elecciones dejadas a la decisión de las bases a pesar de la coyuntura en la que nos encontramos. 

Como dije anteriormente, insisto, tenemos que formarnos mucho más, expandir nuestro conocimiento y reforzarnos con la práctica revolucionaria, es nuestro deber y obligación con los pueblos del mundo, debemos procurar la caída de la Estructura del capitalismo mundial y eso solo se logra tomando la Superestructura que tanto lo protege y resguarda, para ello necesitamos al pueblo organizado y concienciado, porque como bien ya sabemos nuestra lucha es de clases, y de acá, de éste proceso seguirán surgiendo nuevos burgueses mientras sigan imperando las leyes burguesas, y seguirán los medios de producción privados y sus leyes para defenderlos, y seguirá la propiedad privada y sus leyes para mantenerla, y seguirán los ricos explotadores y estafadores y con ello sus abogados, y sus corporaciones y transnacionales legales y los núcleos de producción social ilegales, y los pobres presos y ellos libres, y los pobres sin casas y ellos con muchos terrenos, y los pobres con un mísero sueldo y los ricos con grandes sumas de dinero, y los pobres con una sonrisa hueca y los ricos con todos sus dientes, y los pobres hambrientos y los ricos con dietas.

Es necesario aprovechar estos meses para acercarnos a todos los sectores posibles y comenzar a construir un nuevo modelo de parlamentarismo en el que el pueblo se permita decir cómo pudiese legislar y promulgar leyes revolucionarias que legalice las luchas populares de liberación e independencia para lograr avanzar hacia el Socialismo Bolivariano, ese mismo pueblo que está allí, espera que se le visite, tienen sed de conocimientos y hambre de justicia social, nosotros debemos procurar saciar esa hambre y esa sed.

Conscientes debemos estar que el mundo se nos va a venir encima cada vez que intentemos accionar contra el estatus quo; lo establecido por el capitalismo debe terminar doblegándose ante las decisiones de la mayoría, y nosotros debemos tener fortaleza para superar los obstáculos y las contradicciones que ojala fuesen solo entre corrientes ideológicas, sin embargo acá se nos irá la vida en trasformar la conciencia para en algún momento no ganar votos con campañas sino con el reconocimiento de nuestras acciones por parte del pueblo.

Hay que replantearnos ciertas cosas, estamos ante un mundo globalizado en el que los medios de comunicación influyen directamente en la conciencia de nuestros pueblos, mientras nosotros nos esforzamos con nuestro bajo perfil en rescatar y concienciar a nuestra gente, los medios de comunicación se encargan de deformarlos con rapidez dejándonos en el terreno ante una batalla desigual.

Analizar éstas elecciones internas pasa también por entender que éste pueblo cree que todo lo que ve lo conoce, y como lo conoce le merece su confianza, también pasa por reconocernos como sujetos de éste tiempo, de éste siglo, nosotros hablamos de dinosaurios pero cuidado, a veces pareciera ser que los dinosaurios somos nosotros, venidos de otra época, de otros ciclos, y es que no podemos pensar en tratar al socialismo en pleno siglo XXI como si fuera la Venezuela de 1811 en la que no había televisión, ni internet, ni radio; queremos ser tan puritanos que si pudiéramos nos llegásemos a las barriadas caraqueñas en caballo para no tener que utilizar el Ford o el Chevrolet gringo, hoy usamos hasta teléfonos inteligentes pero a muchos de nosotros nos cuesta aceptar las bondades que nos ofrece la tecnología porque tenemos una concepción burguesa de la misma, ¡vaya mentalidad que nos hicieron tener a los pobres para negarnos el acceso a la tecnología!, casi que nos comunicamos a punta de vasos y alambres para que vean que somos revolucionarios, queremos que la gente nos conozca por nuestro trabajo ¿pero no masificamos lo que hacemos porque somos puritanos?, el domingo ganaron los mediáticos, más allá de cualquier cosa, ganaron los medios de comunicación y una vida atada a ellos, el pueblo confía en lo que ve, en lo que escucha, en lo que siente, no puede confiar en nombres con rostros invisibles, en fantasmas que para unos existe y para otros no, en plena era de la mediática global ¿cómo negarnos a ella?

Les dejamos ese espacio a los reformistas, a los deformados, a los faranduleros y a esos personajes que quisieron hacerse, en su mayoría, un liderazgo fácil a costa de las ondas hertzianas, les dejamos entrar en la casa de cada venezolano y venezolana, les dejamos que los quisieran con sus palabras bonitas carentes de formación política, carentes de ideología, y pensamos hacer revolución a costa de obras desconocidas para la mayoría, nos invisibilizamos nosotros mismos y permitimos que ellos se visibilicen. 

Lo cierto es que tenemos a un imperio atacándonos que maneja el 95% de la mediática mundial, que gobierna gracias  a las conciencias caídas en la batalla que la cuarta generación ganó, no podemos seguir tomando el riesgo de pensar que somos tácitos porque si fuera así, los resultados de hoy fuesen otros, sin embargo debemos procurar mantener un ala la “corriente” clandestina y otra visible que procure dejar una fachada honorable y admirable para la Revolución.

Propongo, más allá de lo mediático que nos definamos dentro de éste proceso revolucionario, como la corriente que hace falta, es hora de debatir de ideologías, de discutir sobre proyectos, de polemizar y profundizar las contradicciones, de darle sentido político-ideológico a nuestra lucha y a ésta revolución, sin temor alguno y con todo el valor que requiere lanzarse como una propuesta política seria, una corriente de pensamiento, bolivariana, marxista y leninista, que enriquezca el sentido y la trascendencia de nuestro Partido y la Revolución. 

De igual manera, lancemos la corriente o no nos atacarán, hoy por hoy pareciéramos ser los perseguidos políticos de ésta Revolución, somos la anomalía del sistema, comprobado está que nuestras prácticas jamás serán como la de ellos, pero igualmente debemos tomar nuestras previsiones y ser responsables, tener a la mano el único fúsil que a la mayoría de ellos les hace falta: la formación. Tenemos cómo hacernos sentir, hacernos notar y hacernos apoyar en el pueblo y por el pueblo, tenemos cómo dejarle a las generaciones futuras un rico legado filosófico-científico-ideológico y cultural sobre una nueva visión y modo de vida enfocado en el marxismo que estamos adaptando a los nuevos tiempos, hay que comenzar a buscar a las y los mejores facilitadores que nos puedan dar luces sobre diversos temas, desde lo económico, filosófico, sociológico, cultural, histórico hasta lo militar y todo aquello que haga falta aprender como por ejemplo, el arte de la oratoria y la escritura e incluso sobre la gestión y la práctica socialista, que son elementos que no deberían faltar en ninguno de nosotros, así como tampoco los elementos básicos del marxismo y una práctica sana y digna de un completo y sólido cuadro revolucionario, porque todo se va reconfigurando hacia el Socialismo y nosotros debemos adecuar esta corriente de pensamiento a nuestra realidad social que no se diferencia mucho de la realidad del resto de los pobres del mundo.

Es necesaria la lucha revolucionaria a la enésima potencia, yo les invito a ser trascendentales y no simples actores y actrices de la política venezolana, nada cuesta tomarnos unos minutos para ver qué nos dice Lenin o Marx, incluso, para saber qué nos dice Bolívar y Rodríguez y ojear los pensamientos de aquellos hombres y mujeres que nos dejaron un rompecabezas por armar juntos, y nosotros aún, nos peleamos por las piezas que tiene el otro, no llamo a una reconciliación , lo cual sería una farsa, llamo a la lucha insoslayable por la conquistas de las soluciones a nuestro pueblo, llamo a independizarnos del tormentoso sistema del capital, llamo al necio deseo amotinado a construir sin descanso el Partido de la Revolución y por último llamo a la formación continua, que va desde nuestra actuación hasta el pensamiento claro, puro y firme, sin vicios ni malas obras que eclipsen nuestro único objetivo final: El Socialismo.

R-Combatientes de CMSKPA